viernes, 21 de noviembre de 2014

Ella y su palacio



Fue un modelo de mujer española moderna y desprejuiciada.
Tuvo lo que se suele llamar un estilo propio, y su riqueza no se le subió a la cabeza.


Le importaba muy poco lo que pensaran de ella.

Al morir su padre heredó un palacio destruido. El palacio de Liria había sido bombardeado durante la guerra civil por la aviación nacionalista.
Ella podía haberse olvidado del palacio y construir allí unos bloques de apartamentos, algo a todas luces muy rentable.
Sin embargo, se gastó la mitad de su fortuna en reconstruir el palacio.


Porque ella no vivía para solo para el dinero; era una mujer culta y sensible.


Y gracias a ella tenemos en Madrid este palacio.







2 comentarios:

Don Bernardino dijo...

Muy a menudo me sorprendes, Osorio. ¿Tú también abducido por una señora que lo más reseñable que hizo en su larga vida fue nacer y morir inmensamente rica? ¿Qué méritos hizo para que los pobres mortales caigamos rendidos a sus pies? ¿Qué le debemos?

Carlos Osorio. dijo...

Hola, Bernardino, no le debo nada, quizás por eso mismo puedo, con objetividad, creer que fue una mujer interesante.