sábado, 30 de marzo de 2013

Cuidemos a los turistas



El turista que visita el centro de Madrid sale de su hotel un domingo por la mañana. 
Va mirando al suelo, debido a que el pavimento parece haber sido diseñado para que el turista se descalabre (baldosas inadecuadas, rotas, levantadas, pavimentos diseñados por técnicos inexpertos y colocados por contratas low cost)
En ciertas zonas. el turista tiene que ponerse una mascarilla anti-gas. El hedor en algunas calles de Huertas, Malasala o Latina es intenso. La tarde-noche anterior mucha gente se ha dedicado a desahogar su vejiga en plena calle. 
El turista ha tenido la precaución de pasar por el lavabo antes de salir del hotel. Sabe que en el centro de Madrid no hay prácticamente urinarios públicos.
El turista lleva una botella de agua enorme para beber. Conoce el estado de las fuentes públicas del centro de Madrid: están todas averiadas y ninguna tiene agua.
El paseante trata de evitar que uno o varios mendigos profesionales, pertenecientes a grupos organizados que controlan las zonas turísticas, se le peguen materialmente al cuerpo y no le suelten hasta que no afloje una moneda.
El visitante contempla espantado la abundancia de pintadas, carteles, chicles y pegatinas que decoran las fachadas de los edificios del centro histórico. Observa también lo dañado que está el mobiliario urbano debido a la impunidad con la que actúan los gamberros.
Mientras piensa en estas cuestiones, un grupo de mujeres carteristas procedentes de un determinado país del Este le sustraen la cartera sin que se dé cuenta.
Estas mujeres carteristas roban cada día decenas de carteras en el centro sin problema ninguno: la ley las ampara.

El Ayuntamiento, la Comunidad y el poder legislativo deberían ocuparse un poco más de estas cuestiones.
El turismo es una de nuestras principales fuentes de ingresos.
¡Cuidemos el centro histórico!
¡Cuidemos a los turistas!

Foto: ABC.



1 comentario:

Anónimo dijo...

El otro dia en casa paco me dijeron que durante la mañana habian entrado 4 carteristas diferentes de los de gabardina y bufanda. cuidadito con los bolsos de las mujeres.