jueves, 28 de abril de 2011

Una voz

En el pasillo de salida a la Gran Vía del metro Banco de España, una mujer cantaba con una voz tan bella y tan emocionada que me puso la carne de gallina.
Le dije: Gracias por tu voz. No se suele oir algo tan bello en el metro.
Me contestó: Me quedé en el paro y estoy en la calle.
Le di una pequeña ayuda.
-¿Puedo hacerte una foto?- Le pregunté.
-Prefiero que no- me contestó- Cuando me hacen una foto, siento que se llevan algo de mí.

1 comentario:

Doña Umé dijo...

A pesar de su desdicha, todavía le quedaba espacio para la poesía.

Bonito mini-relato.

Un abrazo.