jueves, 3 de abril de 2014

Churriguerescos chorreones de lluvia



Ayer, a media tarde se puso a jarrear a base de bien.
Hacía tiempo que no veía llover de esa manera.
Casualmente me encontraba en el claustro del Instituto San Isidro, uno de los rincones más atractivos de Madrid y, pronto, me dí cuenta de que aquella era una lluvia especial.


Fuese por las gotas, que de puro gordas llevaban adheridas gotas más pequeñas, fuese por las cascadas ondulantes, salomónicas, comprendí que aquella lluvia era barroca.


Tan barroca como el propio claustro que hizo Melchor de Bueras en 1679.
Y recordé los versos de Machado, que fue alumno de este Instituto:



Una tarde parda y fría 
de invierno. Los colegiales 
estudian. Monotonía 
de lluvia tras los cristales. 

Es la clase. En un cartel 
se representa a Caín 
fugitivo, y muerto Abel, 
junto a una mancha carmín. 

Con timbre sonoro y hueco 
truena el maestro, un anciano 
mal vestido, enjuto y seco, 
que lleva un libro en la mano. 

Y todo un coro infantil 
va cantando la lección: 
«mil veces ciento, cien mil; 
mil veces mil, un millón». 

Una tarde parda y fría 
de invierno. Los colegiales 
estudian. Monotonía 
de la lluvia en los cristales.

(Antonio Machado)

*****

Fotos: C. Osorio.


6 comentarios:

Matilde dijo...

Redondita, redondita esta inspirada y machadiana entrada

Anónimo dijo...

chorros de gotas melancólicas y aguafiestas,(los llamo yo),salidos de gárgolas de dragón escuálido(que un amigo hizo en el alero de mi casa paterna,rematando la cañería con dicha forma de cabeza de.) recogidas en caldero(porque al amigo se le olvidó poner receptáculo de las mismas y formaban barrizal en el praocésped)lo raro es que ahí no horaden el suelo(cual tántalo provocador)dejando huella (o receptaculo natural)...Con lo tristes que son las aulas de lluvia...y en el norte,oscuras y eternas....Machado fue perito en liceos madrileños...Enhorabuena por tu nuevo libro.(parkímetro de tarxetas roxas a ausencias provocadas...).Saludos.Acacia

Don Bernardino dijo...

Por lo que se ve en tus magníficas fotos, el sistema de canalización de aguas debe ser algo más antiguo que el Barroco, probablemente de cuando en Madrid había dinosaurios.

Carlos Osorio. dijo...

Saludos, Matilde, un abrazo!

Inspirada reflexión, Acacia.

Pues sí, Bernardino, del 1679 es el sistema de evacuación de aguas.

Matilde dijo...

Buenos días a todos,

“En este mundo traidor,
nada es verdad ni mentira,
todo es según el color
del cristal con que se mira”

(Campoamor y doctrina del relativismo)

Yo, probablemente, en parecida circunstancia, me habría sentido
como Carlos

Anónimo dijo...

Siempre que alguien cita ese poema de Machado, recuerdo que Francisco Umbral, en Trilogía de Madrid, decía que siempre sentía la inercia de leer el verso sin punto, es decir, los estudiantes estudian monotonía, que según Umbral era una de las grandes asignaturas nacionales.

Muy bonitas las fotos.