jueves, 30 de junio de 2016

Peñalaire



No es fácil en el Madrid de hoy encontrar un restaurante de cocina española, cocina sana y elaborada con sabor casero, y por eso merece la pena conocer el Peñalaire.
Esta Casa de Comidas de principios de los 70 ofrece una variadísima carta a unos precios realmente asequibles.
Entre semana el menú cuesta 9,70 y el fin de semana 11,50.


Un sitio popular, auténtico, sin concesiones a las modas.
Se puede pedir vino de todas las clases, aunque a mí en un sitio así me pega más el vino con gaseosa.
Verduras, carnes, pescados, legumbres...y ¡hasta fruta!
Hoy, cuando en la mayoría de restaurantes los postres son pura grasa, aquí se permiten pelar una naranja y cortarla en rodajitas. 


Peñalaire: Calle Embajadores nº 21, junto a la iglesia de San Cayetano.



miércoles, 29 de junio de 2016

La nueva vida del mercado de Vallehermoso



El Mercado de Vallehermoso, en la calle Vallehermoso esquina a Fernando el Católico, es uno de los mercados de abastos construidos en la segunda República, con un eficaz criterio racionalista y unas formas no exentas de armonía. Como usuario habitual, puedo asegurar que tiene excelentes puestos de fruta, pescado y carne, y otros de productos alimenticios de almacén.
El caso es que en las últimas cuatro décadas habían cerrado toda una serie de puestos debido a la competencia de los supermercados y grandes superficies.
Pero algo se mueve en su interior.


En el último año han abierto sus puertas una veintena de nuevos puestos, algunos de ellos realmente interesantes. Uno de los que más me gustan es la panadería "El Horno de Babette", con un pan auténtico de mucha calidad.


Hay un puesto de productos asturianos, otro de carnes del mismo Principado, otro de carnes de la Sierra de Guadarrama, uno de productos ecológicos, dos de quesos artesanos (de Córdoba y Albacete), uno de sobaos y quesadas de Cantabria, varios de comida para llevar...


Un puesto de cervezas artesanas La Virgen, y varios bares. Está bien que los mercados tengan bares y restaurantes; pero con un control, porque si proliferan pueden acabar por fagocitar aquello que se pretendía revitalizar, como ha pasado en San Antón y en San Miguel. El caso es que los fines de semana, al atardecer, un nutrido público juvenil inunda el mercado para visitar estos nuevos bares.


Los puestos de toda la vida me parecen magníficos, los veo como una inmejorable exposición de arte conceptual a base de frutas, verduras, pescados...
Hacer la compra en uno de estos mercados, conversando con los tenderos, es una experiencia gratificante. Consumes productos de tu país, y el dinero se queda en tu barrio, no se va a lejanas tierras como en las grandes superficies. Es la experiencia de los mercados madrileños.


Fotos: C. Osorio.


martes, 28 de junio de 2016

Arte topiario en Madrid



La poda ornamental también se conoce como arte topiario. Topiario viene del latín Topiarius, que significa creador de lugares o creador de jardines.
Se trata de ir podando los árboles con intención artística para que adopten formas geométricas.
Este arte, practicado en jardines de diversos estilos (renacentista, neoclásico, versallesco) tuvo un especial desarrollo en Madrid en el siglo XX. Son especialmente atractivos los cipreses del parterre del parque del Retiro, con esas formas globosas que vemos en la primera imagen.


El arte topiario está muy presente en los jardines de Sabatini y en la Plaza de Oriente.


También en los jardines de Cecilio Rodríguez, en El Retiro. Este tipo de poda ornamental tuvo mejores momentos en el pasado, cuando existía la escuela de jardineros de Madrid y los parterres estaban a cargo de jardineros expertos. Hoy los cipreses están casi todos torcidos y perdiendo el compás, como si los regaran con vino.


Una variante del arte topiario es la creación de figuras con plantas enredaderas. Previamente se crea un armazón con alambre, y se deja que la planta cubra el armazón para luego recortarla.
Es el caso del Bosque Encantado de San Martín de Valdeiglesias, un lugar muy visitado por familias con niños.





lunes, 27 de junio de 2016

Modernismo en la calle Infantas



En la calle Infantas, 23 tenemos un interesante edificio modernista del arquitecto José Carnicero, construido en 1909. 
En realidad, el edificio ya existía desde fines del XIX y se le reformó intensamente, dotándolo de una nueva y deslumbrante fachada.
Vale la pena deleitarse un rato con sus esmerados trabajos de yeso y su soberbio uso del hierro.


En los bajos hay un bar que estéticamente desentona con el conjunto, pero que ofrece unas tapas pantagruélicas.

Fotos: C, Osorio.

sábado, 25 de junio de 2016

Cómo éramos y como somos: Vivíamos en el mundo real.



Antes de que nos comunicáramos mediante el móvil, antes de que nuestra vida social se hiciera en las redes, hubo largos siglos en los que nos relacionábamos dentro de lo que hoy llamamos el mundo real.
Los niños jugaban a juegos que requerían imaginación y ejercicio físico.
Los amigos eran seres reales a los que podías ver, oir, y tocar, y acudían a menudo cuando los necesitabas.
Ir de compras era una experiencia placentera, porque había tiendas y dependientes de confianza que te asesoraban.
Las gentes no solo dedicaban el ocio a ver las ocurrencias que se publican en las redes, también leían libros.






Así éramos: Vivíamos en el mundo real.




miércoles, 22 de junio de 2016

Ayer y hoy del barrio de Palomeras, 2.



El barrio de Palomeras, en Vallecas, ofrecía este aspecto en los años cincuenta y sesenta.
Gentes llegadas a Madrid desde el campo depauperado se construyeron sus propias casas en calles irregulares donde la tierra se convertía en barro cuando llovía y en polvo cuando hacía sol.


Casas sin agua corriente, sin luz eléctrica. Familias que luchaban por salir adelante y encontrar una vida mejor.


La ropa tendida en las calles, agitándose al viento como una bandada de palomas.


Y ya en los setenta, un bosque de antenas de televisión y de palos del tendido eléctrico  presagiaba una vida con más comodidades.


Gentes venidas de Andalucía, de la Mancha, de Extremadura, que pasaron a convertirse en madrileños. Gentes que lucharon por una vida mejor y que vieron transformarse aquella humilde barriada de casitas y chabolas en un barrio más de la ciudad.






martes, 21 de junio de 2016

Ayer y hoy del barrio de Palomeras



Recuerdo el agradable paseo que nos dimos esta primavera con Paco Gómez, autor del blog "El cajón del maestro", por el barrio de Palomeras, donde él ha sido maestro.
La tarde comenzó con una buena comida en la Escuela de Hostelería del Padre Llanos, en la calle Martos 15, cerca de la estación de El Pozo, donde previa reserva se puede comer por un precio en torno a los 15 €.
Luego Paco nos enseñó su colegio, donde hay un huerto urbano.


Algunos edificios de realojo resultan un tanto desmesurados, sobre todo teniendo en cuenta que este fue un barrio de casitas bajas. Claro que, las condiciones de habitabilidad de aquellas casitas no eran nada recomendables.


Para dignificar el barrio se creó un museo de esculturas al aire libre, que te va sorprendiendo a cada paso.


El Centro Cultural Paco Rabal es el lugar de reunión de los vecinos del barrio. 
Allí, los niños juegan mientras los sufridos padres se toman una caña y comentan entre ellos el día a día de la crianza y la educación de los chavales.


El menú del día del centro sale muy apañadito.


Luego contemplamos en edificio de la Asamblea de Madrid, obra de Ramón Valls y Juan Blasco, de 1994.


Junto a él se halla uno de los edificios residenciales más atractivos de la zona.


Luego nos quedamos atónitos con las grandes chimeneas de un complejo térmico-energético que nunca llegó a funcionar


Y vemos la estación de Entrevías, arquitectura grandilocuente y poco convincente.


Mucho ha cambiado el barrio, como veremos en las fotos antiguas que publicaremos mañana.



lunes, 20 de junio de 2016

De cuando los madrileños vivíamos en cuevas



Desde el paleolítico hasta los años 60 del siglo XX ha habido madrileños viviendo en cuevas.
La configuración arenosa o yesífera del terreno facilita la excavación de cuevas-vivienda.
Las más antiguas pertenecen al Paleolítico y se hallan en los cortados yesíferos de Perales de Tajuña, o en zonas próximas a Vallecas y Villaverde. El Titulcia existe aún un nutrido grupo de cuevas vivienda, habitadas hasta fechas reciente, en un estado de conservación un tanto lamentable que merecería una intervención de Patrimonio Histórico.


Por lo que respecta al casco urbano madrileño, hay referencias a las cuevas vivienda en muchos barrios de Madrid a lo largo de los siglos. Cuevas excavadas en la arena, especialmente en las terrazas formadas por el Manzanares y por varios arroyos.
Las fotos anterior y posterior corresponden a viviendas-cueva de Tetuán en los años 60.


Y esta última imagen corresponde al barrio de la Concepción.
Entre los años 40 y 60, época dura y difícil de la posguerra, varios miles de madrileños vivían en cuevas por no poder alojarse en otro tipo de viviendas.





sábado, 18 de junio de 2016

Lo bueno y lo nuevo



Cómo éramos y cómo somos: Lo bueno y lo nuevo.

 Fonéticamente se parecen, pero su significado puede ser opuesto. Lo bueno puede ser nuevo, pero lo nuevo tiende a no serlo, porque las cosas necesitan un tiempo de rodaje para funcionar bien.
Sin embargo, la confusión está servida: todo lo que se anuncia se anuncia como nuevo, y casi nunca como bueno.
Decimos: "He ido a un restaurante nuevo", cuando antes decíamos:
"He ido a un restaurante bueno".
Y así con muchas otras cosas.

Teníamos más clara la distancia entre lo bueno y lo nuevo.





jueves, 16 de junio de 2016

Merecerían una calle en Madrid



Maslama al Mayriti (Maslama el madrileño) primer científico conocido de nuestra ciudad, no tiene dedicada ninguna placa ni ninguna calle.


Arturo Barea: Escritor de una de las mejores novelas españolas del siglo XX: "La forja de un rebelde", no tiene ningún recuerdo en la ciudad a la que dedicó su gran novela.



Melchor Rodríguez: Conocido como "el ángel rojo" se distinguió durante la guerra civil por intentar hacer respetar las leyes, protegiendo a los presos del bando contrario y jugándose la vida en repetidas ocasiones defendiendo los derechos humanos.



miércoles, 15 de junio de 2016

Cock Bar



"El gallo de Oro", más conocido como el Cock, es la coctelería más antigua y con más estilo de Madrid.
Cock se creó en 1921 en la calle Reina nº 16. 
Su fundador, Emilio Saracho viajó a Londres buscando inspiración para abrir este bar.
Su decoración, agradablemente clásica nos recuerda a los buenos sitios de copas de nuestra vieja y querida Inglaterra.


En los años 30 pudo verse por aquí a Buñuel, Dalí o Mihura,
En 1945 lo adquiere el barman Perico Chicote. En esa época lo visitaron 
Ernest Hemingway, Ava Gardner, Luis Miguel Dominguín, Audrey Hepburn, John Wayne, Samuel Bronston…
En la época dorada de los cincuenta y los sesenta, sus sillas sobrias y sólidas a la par que elegantes, acogieron a todo el famoseo local y visitante.


Las espesas cortinas, los biombos y los camareros discretos, nada supieron nunca de los amores inconfesables que aquí se citaron.
Se decía que a través de una puerta discreta se podía pasar del bar Chicote al Cock y viceversa.
En 1985, al morir Chicote, lo cogen en traspaso Teresa Nieto, José Astiárraga y Patricia Ferrer. 
En la época de la Movida se vio en este lugar a Harrison Ford, Susan Sarandon, George Clooney, o los hermanos Cohen acompañados por Almodóvar. 
Muy relacionados con la feria de Arte ARCO, aquí se bebió sus últimos Dry Martini el pintor Francis Bacon.


Los cócteles tienen precios razonables, especialmente en las primeras horas de la noche.
Desde sus orígenes, el más demandado es el Dry Martini:
Originariamente hecho con ginebra y vermú a partes iguales, hoy se hace con mucha ginebra y muy poco vermú. Se enfriar y se retira el hielo, diebiendo removerse bien. Se sirve en copa de cóctel, exprimiendo el aceite de la piel de un limón, y adornado con una aceituna cruzada.


Fotos: C. Osorio.


lunes, 13 de junio de 2016

Frases de Miguel de Cervantes




-Confía en el tiempo, que suele dar dulces salidas a muchas amargas dificultades.

-La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida.

-Encomiéndate a Dios de todo corazón, que muchas veces suele llover sus misericordias en el tiempo que están más secas las esperanzas.

-Amor y deseo son dos cosas diferentes; que no todo lo que se ama se desea, ni todo lo que se desea se ama.

-Las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombres; pero si los hombres las sienten demasiado, se vuelven bestias.

-La senda de la virtud es muy estrecha y el camino del vicio, ancho y espacioso.

-Si los celos son señales de amor, es como la calentura en el hombre enfermo, que el tenerla es señal de tener vida, pero vida enferma y mal dispuesta.

-El que no sabe gozar de la ventura cuando le viene, no debe quejarse si se pasa.

-El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho.

-La verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira como el aceite sobre el agua.

-Amistades que son ciertas nadie las puede turbar.

-La música compone los ánimos descompuestos y alivia los trabajos que nacen del espíritu.

-Sé breve en tus razonamientos, que ninguno hay gustoso si es largo.

-Come poco y cena menos, que la salud de todo el cuerpo se fragua en la oficina del estómago.

-La abundancia de las cosas, aunque no sean buenas, hacen que no se estimen, y la carestía, aun de las malas, se estima en algo.

-Más vale una palabra a tiempo que cien a destiempo.

-Los delitos llevan a las espaldas el castigo.

-Mientras se gana algo no se pierde nada.

-No desees y serás el hombre más rico del mundo.


Recordando a Cervantes en el 400 aniversario de su muerte.

sábado, 11 de junio de 2016

Cómo éramos y cómo somos: preferíamos el valor al precio.



Cuando alguien se compraba algo, una prenda, un aparato electrónico, no hablaba del precio, hablaba de la calidad, del prestigio de la marca, de la fábrica o del país en que se había fabricado, de las prestaciones  y del largo tiempo que pensaba disfrutar de este artículo. El precio era el último argumento en ser expuesto.

Así éramos: preferíamos el valor al precio.



miércoles, 8 de junio de 2016

Gracias por tu visita! Y van dos millones!


En estos días, el blog "Caminando por Madrid" ha llegado a los dos millones de visitas.


Fue en 2008 cuando el blog empezó a caminar.
Entonces la foto de portada eran las recientes cuatro torres desde la valla de la Quinta del Pardo.


Actualmente la portada refleja la Plaza del Alamillo.
Caminamos con los ojos muy abiertos, mirando con curiosidad y también haciéndonos preguntas.
¡Seguimos Caminando por Madrid!

¡¡Muchas gracias por tu compañía!!