martes, 11 de enero de 2011

Vailima


 En la calle del General Pardiñas nº 54 tenemos un pequeño y agradable salón de té. Vailima, que así se llama, está ligado a una casa de té francesa: Theodor. Pese a que en su web se jactan de saberlo todo sobre los tés y su correcta preparación, a mi me lo sirvieron templado, con exceso de agua y en un sobrecito de papel. El servicio es correcto, pero frío. En este tipo de establecimientos suelen contratar a camareros que no conocen bien el idioma ni las costumbres locales, y yo creo que eso es un error. Un café que se precie debe tener un camarero-a con tablas para que dé calor y animación al local.
Pese a todo, hay que decir que el sitio está bien para tomar un café y echar un ratito de conversación.



Fotos: Carlos Osorio

5 comentarios:

Doña Umé dijo...

Para tetería, bonita, bonita , acogedora,y con una preciosa decoración, la de "LIVING IN LONDON" en la C. Santa Engracia nº4 de Madrid.
También tienen unos sandwiches y ensaladas muy ricas, y qué decir de las tartas.
Ideal para invitar a alguien con buen gusto, a quien se quiera sorprender.
Ver las imágenes en Internet, es suficiente para darse una idea.
A mí también me invitaron.

Carlos Osorio. dijo...

Hola Umé,¿Qué tal? Pues el caso es que ya he hablado de ella en esta misma sección de "cafés y dulces".

Doña Umé dijo...

Es cierto Carlos. El caso es que después de insertar el comentario, me pareció recordar que ya lo habías hecho tú antes.
Pero te prometo otro rinconcito encantador y recoleto, que he descubierto hace poco. Lo haré en otra de tus entradas sobre cafés. En éste no me vas a "pillar"...Jaaa!!!!!....

Monkini dijo...

Cuanta razon tienes. Los camareros y maitres son una parte fundamental de cualquier restauran, bar, cafeteria... Es dificil de entender como se descuida esto en sitios donde se gasta mucho en mobiliario, materia prima, bodega, etc. Donde se ponga un camarero experimentado, o camarero-dueño, e incluso algun joven pero espabilado y que lo hace con gusto. Eso si hace la diferencia de cualquier lugar.

Carlos Osorio. dijo...

Estoy impaciente, Umé. Muy bien expresado, Monkini!